Es casi imposible cuantificar el número de películas que se han hecho sobre la Segunda Guerra Mundial, uno de los temas más retratados en el cine de Estados Unidos y Europa. Pero de todas ellas, es un porcentaje muy limitado el que se centra en la población civil durante la contienda, más que en el desarrollo de las acciones militares. El cine europeo ha sido más proclive a ello, también porque fue el que soportó la guerra en su suelo, a diferencia de Estados Unidos. Títulos como “Dos mujeres”, de Vittorio de Sica; o “Roma, ciudad abierta”, del propio Rossellini, son paradigmas de este subgénero. Rossellini y De Sica son precisamente los principales artífices de esta película, detrás y delante de la cámara.