Es muy habitual que las grandes corporaciones gestionen la documentación de archivo centralizadamente, en ubicaciones externas, mediante empresas especializadas en custodia de archivos. Cuando digo “centralizadamente” es desde un punto de vista interno, y me refiero a que la responsabilidad de la gestión de esa documentación de archivo se encuentra en una organización corporativa, dentro de los llamados servicios generales o recursos corporativos.