La actividad normalizadora ha sido de tal calibre que en pocos años hemos pasado de una reducida lista de estándares a la actual y casi inabordable relación de siglas. La actividad de los nuevos órganos encargados de producir normas, centrada en la elaboración de estándares para proporcionar instrumentos con los que alcanzar objetivos comunes y conseguir resultados similares y/o comparables, se centró, por una parte, en la creación de normas para describir documentos (ISAD), productores (ISAAR), funciones (ISDF) y centros archivísticos (ISDIAH) y sus correspondientes formatos para la transmisión de datos (EAD, EAC). Y por la otra el objetivo ha sido la gestión de documentos, elaborándose un conjunto de normas identificadas como ISO 15489:2001 Record Management, basadas en las australianas AS 4390 y seguidoras de las líneas de las ISO 9000 sobre los sistemas de gestión de calidad en la organización.
La ocasión para esa reflexión ha sido el Congreso de Archivos de Castilla y León cuyas actas se publican este número.