Mucho hay escrito sobre coleccionismo, la afición por encontrar y poseer objetos únicos o peculiares. En ciertas ocasiones esta devoción por lo vintage o lo histórico (según la antigüedad que posean los objetos) puede ir más allá de lo habitual, y cuando una persona posee este amor por el coleccionismo, además de una tremenda cantidad de dinero, se puede dar lugar a algo especial, ciertamente mágico. Este es el caso del cofundador de Microsoft, Paul Allen, y algunas de sus colecciones, como la Jimi Hendrix Music Experience y la Flying Heritage Collection, ambas maravillosas, pero ha adquirido una nueva, en este caso de ordenadores, las leyendas de los ordenadores. El Living Computer Museum es el nuevo proyecto de este millonario coleccionista.