El correo electrónico ha pasado a ser uno de los medios de comunicación más usados por las empresas, las administraciones y los ciudadanos, y a menudo son el reflejo de sus actividades e interacciones. Cuando este es el caso, aparte del valor primario, a medio plazo permitirá dar fe del cumplimiento con las obligaciones legales, apoyar la toma de decisiones de las organizaciones, su gestión del conocimiento o, algunos de ellos conservados de manera permanente, preservar su memoria histórica y ciertos valores culturales.