El mundo profesional ha pasado de ignorar los archivos sindicales a convertirlos en centro de interés, especialmente por el impulsode la memoria democrática. Sin embargo la mayoría de las organizaciones sindicales continua teniendo abandonada su documentación, en unos casos en almacenes y en otros depositándola en los archivos generales de las comunidades autónomas. Solo algunas han impulsado sus archivos y les han dotado de los recursos necesarios para utilizarlos en las actividades culturales y/o para la gestión sindical. Como ejemplo del buen hacer archivístico a nivel sindical traemos a nuestras páginas centrales la experiencia de Comisiones Obreras de Castilla y León que a través de Fundación Jesús Pereda ha realizado una gran labor de puesta en valor la documentación sindical.
